Desayuno incluido en el hotel.
Dispondremos del día libre en Bolonia. Una opción es visitar el Santuario de la Madonna di San Luca, un lugar emblemático de la ciudad, al que se accede a través de un pintoresco pórtico que serpentea hasta la colina, o simplemente caminar por sus calles empedradas. No olvides hacer una pausa para probar un gelato artesanal!
De forma facultativa, podremos realizar una excursión a Rávena y Ferrara. En Rávena, recorreremos junto a un guía local su centro histórico, famoso por sus monumentos decorados con mosaicos excepcionales, como la Basílica de San Vitale, el Mausoleo de Gala Placidia y la Basílica de Sant’Apollinare Nuovo*. Cada rincón nos hablará de su pasado como capital del Imperio Romano de Occidente.
Tras el almuerzo libre en el centro de Rávena, tendremos tiempo para disfrutar de su ambiente relajado, visitando tiendas locales o explorando la cercana playa de Marina di Ravenna.
Por la tarde, ponemos rumbo a Ferrara, donde pasearemos con un guía local por su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad. Conoceremos el imponente Castello Estense, rodeado de fosos, y la Catedral de San Giorgio, reflejo de su herencia renacentista.
De vuelta en Bolonia, contaremos con tiempo libre para cenar y descansar.
*Visitas exteriores, entradas no incluidas.